sábado, 26 de marzo de 2011

El oculista decepcionante.

 

 

 

 

 

Bashar Al Assad, el dictador sirio, se formó como oftalmólogo en Inglaterra. Su esposa Asma, nacida en Inglaterra, trabajó en JP Morgan en Nueva York. Bashar nació en 1965 y Asma en 1975. Y me parece inconcebible que con su edad, su educación y su cultura se mantengan al frente de un régimen autocrático. O es un incapaz, o un cobarde, o es un cínico.